Thursday, December 08, 2011

CELAC

CELAC

Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños

Tal como dijo el Profesor Paraguayo Rodolfo Romero Garcete, “el sueño ya es realidad”. El 2 y 3 de Diciembre se institucionalizo. Y me siento feliz y muy orgullosa por el hecho de que el Paraguay sea uno de los principales protagonistas y facilitadores para que esta Comunidad sea una realidad – creo también que solamente con el fuerte espíritu y emoción latinos podríamos hacer posible tamaño proyecto, que es, antes que todo, político.
Creo que la mayoría de las personas no se detuvieron a pensar y entender que significa nuestra unión.
No fue solo Simón Bolívar, ya oí hablar que el Doctor Francia lo pensó antes, inclusive, pero la verdad es que durante décadas hubo varios intentos, sofocados y fracasados porque realmente no es del interés de muchos países, principalmente de los que viven a costilla de nuestras materias prima y de otros beneficios.

El periodista argentino Guillermo Piernes en su libro Comunicación y Desintegración de América Latina, habla de varias medidas aplicadas para que nunca nos integremos y entonces menciona ferrocarriles con anchuras diferentes, voltajes eléctricos, cables y sistema de televisión, sin contar que cada país tiene un problema fronterizo con un vecino…

Hace muchos años me sorprendí con la propuesta del Ex Presidente Alan García, del Perú, convocándonos a unir fuerzas y debilidades, y hablaba de la posibilidad de que todos los deudores nos juntásemos para defendernos de muchos abusos de bancos estatales y privados de grandes potencias, el creía que unidos podíamos marcar ciertas pautas de desarrollo e imponer condiciones de pago – en la época fue un escándalo…

Me atrevo a afirmar y no estoy sola, que todavía no somos primer mundo por culpa de las políticas monetarias, económicas y financieras trazadas para nosotros por técnicos, políticos e idealistas que no nos conocen profundamente, el FMI, el Banco Mundial, el Grupo de los 8, el BID y hasta la propia OEA y como bien dice el Presidente Hugo Chávez, desde los hoteles 5 estrellas de lujo, en almohadas acogedoras, aire acondicionada y bebidas finas, es muy fácil hacer cortes presupuestarios, planear despidos, exigir altas competitividades donde hay hambre y pobreza. Hay también, y peor aun, los que se basan en análisis de falsos diplomáticos, como los que todos constatamos en diversos wikileaks norteamericanos, quienes improvisan informes sustentados en chismes, rumores y observaciones mediocres y así proyectan los rumbos y los cambios para nosotros. También se basan en deficientes encuestas, manipuladas, nada técnicas y superficiales que agravan la idea, totalmente equivocada sobre nuestras realidades e idiosincrasias, casi siempre ignoradas.

De estos soportes técnicos nefastos salen casi todos los proyectos que derivan en altísimas deudas cuyos intereses los pagamos todos, con mucho sufrimiento y como dijo el matemático argentino Guillermo Parodi, son deudas que deberíamos considerarlas como hediondas y no deberíamos pagarlas, puesto que nunca utilizamos las sumas expuestas. Son proyectos comprometidos no realizados por su dificultad o imposibilidad, pero que nosotros pagamos, y cuanto más consultores enviados, mayor la deuda.

Somos victimas también de las limitaciones, chantajes y bloqueos tecnológicos, patentes y etc. No disponemos de las tecnologías, pero los países ricos, sí disponen de nuestras materias primas.

Con nuestra integración política, económica, energética, financiera, educativa, académica, comercial, en salud publica, tecnológica, técnica, policial, vial, aeroportuaria, ferrocarrilera, rutas, ríos, mares, hidrovías, jurídica, laboral, diplomática, en políticas de Derechos Humanos, políticas tributarias, en las comunicaciones, internet banda ancha rápida, libre circulación de personas y mercaderías, la supresión de visas y hasta la unión de nuestros arsenales militares, nuestras riquezas naturales, nuestra energía, resistencia y vitalidad, seremos mas fuertes que todos y en todos los ámbitos y en todos los aspectos, aquí nuestra única exigencia será el respeto a la identidad de cada uno, la cultura, las tradiciones y la idiosincrasia, siendo así, nuestro progreso y desarrollo serán super acelerados y eficientes, habrá muchos empleos, mas gente pagando mejores impuestos, mas servicios, será como un efecto domino al revés, estoy segura.
El Ingreso de los Estados Unidos y Canadá, seguramente se dará pero con nuestras condiciones, de acuerdo a los intereses de la mayoría de los 33 países
Marzha Navarro