LA RECONSTRUCCION DEL ESTADO

LA CONSTRUCCION DEL ESTADO
Y el robo de semillas

Considero importante divulgar que Francis Fukuyama, Doctor en Ciencia Política de la Universidad de Harvard, escribió un libro corrigiendo sus errores anteriores. Se dio cuenta de que sin la presencia del Estado ningún país del mundo será viable y dijo:
“Es hora de restaurar la soberanía estatal”. En su último libro, La construcción del Estado, escribe: "En este libro defiendo la construcción del Estado como uno de los asuntos de mayor importancia para la comunidad mundial, dado que los Estados débiles o fracasados causan buena parte de los problemas más graves a los que se enfrenta el mundo: la pobreza, el sida, las drogas o el terrorismo".
Coincidentemente cuando pensaba escribir esta nota, me encuentro con el Presidente Nicanor Duarte afirmando estar construyendo el Estado Paraguayo. ¿Como se construye el Estado?
Empieza por nuestro sacrificio, todos pagando nuestros impuestos conscientemente y controlando nuestros gastos, registrando todos nuestros ingresos y egresos.
La oficina recaudadora debe tener una única ventanilla para dinero en efectivo, todas las demás deberán trabajar con papeles.
La organización deberá ser perfecta, los funcionarios súper capaces y honestos.
La transparencia debe ser generalizada, ya que un número batera con otro en las contabilidades, la informática lo hará en segundos.
Con una administración eficiente, lo recaudado pagara a los funcionarios públicos, enviara la importancia necesaria para cada ministerio y aun podrá subsidiar los puntos más vulnerables de la economía nacional.

Economía no es lucro, no es comercio, no es competitividad, ni finanzas – economía es administración de escasez por el bien común.
En el Paraguay el punto más importante y vulnerable a la vez es la agricultura, las tierras, el campo.
Paraguay es un país rural por excelencia, cuando el campo va bien, el país va bien, esto todo mundo sabe.
Antiguamente guardar un pedazo de tierra como ahorro para la vejez era una buena estrategia familiar, hoy eso ya no es posible, ya que las tierras son materia prima importantísima para grandes y pequeños cultivos, grandes como la soja, demandada por el mundo; Pequeños para alimentar, educar y hacer crecer pequeños núcleos familiares. Ambos generan empleos y activan la circulación de capital.
La microeconomía es para autoconsumo y crecimiento interno, fortalece el Estado Paraguayo en su esencia. Todos debemos colaborar para que el campesino que abandono el campo pueda rescatar su cultura y actividad tradicional. El que roba del campesino esta reventando el Estado Paraguayo.
Marzha Navarro