DON MARTIN LLANES

Hoy si estuviera vivo mi suegro DON MARTIN LLANES cumpliría 101 años y para que el sea parte de las informaciones de internet, creo muy importante contar quien fue aquel HOMBRE. Contar que fue Ex Combatiente de la Guerra del Chaco es poco porque el, en realidad lucho toda su vida, no tuvo infancia, adolescencia, juventud, fiestas, solamente mucho trabajo, el, sus hermanos y su madre DOÑA MAGDALENA LLANES. Lo observe durante años, décadas, y siempre me sorprendía sus ideas, sus criterios, sus acciones, sus discursos políticos, era un hombre de visión. Lo vi llorar cuando mi esposo le entrego un ejemplar de su primer libro de Derecho. Siempre siempre preocupado por su pueblo, nunca dejaba de trabajar por su comunidad, siempre aportando en ideas, acciones y dinero. Nacido en Ipacarai, y no sé cómo ni porque llegó a la ciudad de ITA, interior del Paraguay y en la época muy aislado, pero tenía bastante noción del mundo, tal vez por el acceso de las emisoras de radio del mundo a través de los aparatos transistorizados. No sé también como se formo de sastre, pero pude constatar lo que construyo gracias a esta profesión, este ARTE, como se llamaba su sastrería, solo con su inteligencia, trabajo y alto espíritu de solidaridad. Cuenta mi esposo que todas las tardes DON MARTIN hacia lo que llamaba de ACADEMIA, el pasaba para su familia algunas informaciones, consejos y educación cívica ciudadana, lo que hacía también en la Municipalidad, en la seccional de su partido y en todos los foros que participaba. Era solidario por naturaleza. Creo que debido a su carácter, sabiduría y equilibrio era natural y sabiamente un consejero del pueblo, vi, en varias ocasiones, personas de todas las edades, clases sociales y tipos de formación académica o sin formación alguna, acudir a sus orientaciones, indicaciones y opiniones, en algunas veces eran peleas matrimoniales. Entre todas sus labores por el progreso de la Ciudad y de sus pobladores, que creo, ya merecía un Premio Nobel, quería destacar lo que más me impresiono. Siendo todos de origen muy humilde, el tuvo la BONDAD de llevar a su sastrería y a su casa, cada uno de sus sobrinos, sobrinas y ahijados para que aprendan el oficio de la costura, los asumía, los amparaba, los educaba y al lograr mayoridad les regalaba también una máquina de coser para empezar sus pequeñas sastrerías. En la Revolución del 47 perdió todo, pero como hormiga el y su familia reconstruyeron todo de nuevo, incansable. DON MARTIN LLANES, también cruzaba las fronteras, y personalmente hacia contactos para traer trabajos de otras sastrerías del Brasil y de Argentina. Y gracias a sus hijos viajo bastante a varios países, nunca dejaba de analizar, admirar y pensar como se podría implementar en ITA y en el PARAGUAY todo el progreso que contemplaba. Yo pido un aplauso de pie para mi suegro DON MARTIN LLANES, un ciudadano paraguayo ejemplar!